Durante los días calurosos, muchos de nosotros, cuando miramos los acuarios, envidiamos a nuestros peces que nadan constantemente en el agua. ¿Quién no querría nadar en la piscina en lugar de sentarse en el trabajo o en una sala de estar sobrecalentada? ¿Es realmente tan cómodo para los peces? ¿Quizás durante los días calurosos sea necesario bajar la temperatura del agua en el acuario?
Una temperatura más alta significa menos oxígeno en el agua
Recuerde que la mayor cantidad de oxígeno disuelto se observa en los rápidos y fríos arroyos de las montañas. A medida que aumenta la temperatura, el nivel de oxígeno en el agua desciende. Este problema afecta a cualquier entorno, desde el estanque hasta el acuario doméstico. No todos podemos permitirnos el aire acondicionado en casa o en el apartamento, y en los días cálidos de verano, la temperatura en las habitaciones suele superar los 30⁰C.
La mayoría de los peces están adaptados a vivir en un entorno con una temperatura de 24 - 26⁰C y consideramos que estos peces son "estándar" en los acuarios. Algunas especies prefieren aguas más frías, por ejemplo, los peces arco iris, Notropis chrosomus (18 - 22⁰C), otras: por ejemplo, los peces disco o las lochas prefieren aguas más cálidas (26 - 30⁰C). Los peces pueden adaptarse hasta cierto punto a temperaturas distintas a las de su entorno natural durante décadas. Sin embargo, generalmente afecta a su comportamiento, búsqueda de alimento y esperanza de vida.
Capacidad calorífica específica del agua
Sin lugar a dudas, el agua es una sustancia química realmente asombrosa. Puede hablar durante horas sobre los enlaces de hidrógeno, la estructura del dipolo, las excelentes propiedades de los disolventes, etc. Desafortunadamente (desde nuestro punto de vista), también tiene una capacidad calorífica específica muy alta, es decir, el calor (energía) necesario para cambiar una unidad de temperatura de una unidad de masa. En resumen, si queremos subir o bajar la temperatura del agua en 1⁰C, tenemos que ponerle mucha energía. Hay muchas formas de bajar la temperatura del agua. Presentemos los más populares, desde el básico hasta el avanzado.
Maneras de bajar la temperatura del agua en el acuario.
-Sombreado del área del acuario: si el tanque está en contacto constante y directo con la luz solar
-Apertura de las tapas de los tanques - el agua que se evapora desprende calor al ambiente. Muchas personas ignoran este hecho por temor a grandes pérdidas de agua asociadas a él, pero la naturaleza trata de regular la temperatura misma de esta manera y vale la pena permitirlo.
-Tiempo de iluminación más corto: incluso los últimos tipos de iluminación LED generan calor. En los días calurosos conviene reducir el tiempo de encendido del tanque.
-Aumentar la distancia entre la superficie del agua y la fuente de luz - la iluminación, al generar calor, afecta la temperatura del agua. Colgando la lámpara en el techo y acortando su distancia en relación a la superficie del agua, podemos bajar la temperatura en el tanque. Tener una cubierta de acuario tampoco es un problema: basta con colocar una pequeña madera cuadrada con un lado de 1 cm en el acuario o material similar para "abrir" toda la cubierta.
-Ventilador - "soplar" el aire caliente formado entre la iluminación y la superficie del agua permite, según diversas estimaciones, bajar la temperatura en 1 - 2⁰C. ¡Es mucho! Podemos utilizar un ventilador de habitación para este propósito, montar el conjunto nosotros mismos utilizando ventiladores de computadora o comprar conjuntos de ventiladores dedicados para su uso en acuarios. Tienen una ventaja innegable: puede dirigir el flujo de aire en diferentes ángulos y unirlos al borde del tanque.
-Hielo: el agua congelada en una botella o una bolsa de pescado, arrojada al tanque, reducirá la temperatura. El método es laborioso, pero la sustitución periódica de los envases da muy buenos resultados y permite reducir la temperatura entre 3 y 4⁰C.
-Enfriador de acuario: el método más avanzado para enfriar el agua del acuario. El agua, que fluye en espiral a través del dispositivo, se enfría a la temperatura establecida por el acuarista. Un enfriador es un gasto financiero significativo, pero en el caso de tanques grandes y / o especímenes valiosos que nadan en un acuario, a menudo es un elemento necesario del equipo.
Otros métodos y ¿qué es lo que realmente no vale la pena hacer?
-Tirar cubitos de hielo en el tanque: el método puede ser efectivo en acuarios pequeños de varios litros, preparados con agua RO / RODi, y le permite reponer la parte evaporada del líquido. Sin embargo, la evaporación en un área pequeña nunca es lo suficientemente grande como para compensar solo la escasez; siempre encontramos un exceso de agua, que está asociado con su cambio.
-Cambios de agua mucho más frecuentes e intensivos: muchas personas usan agua del grifo para este propósito, generalmente más fría en al menos 10 ° C que nuestro entorno. Puede parecer que esto es una cura para todos los males, pero el agua para acuarios debe tratarse. Además, enfriar el tanque demasiado rápido puede reducir la resistencia de los peces y, por lo tanto, causar enfermedades. Imagínese saltando entre una ducha helada y una ducha caliente; así es como se sienten los peces cuando sube la temperatura.
Recordemos que el verano es un período en el que hay menos agua potable en la gestión hídrica nacional. Esto puede afectar su calidad y parámetros. El agua que llega a nuestros grifos debe cumplir con los estrictos estándares de las instituciones de salud gubernamentales, pero lo que es aceptable para los humanos puede debilitar un pequeño ecosistema doméstico.
Cuida el oxigeno del agua
Cada una de las formas de lidiar con el exceso de temperatura tiene sus pros y sus contras, y cada acuarista responsable elegirá el método que más le convenga. No nos olvidemos de la oxigenación más intensiva del agua, y durante los viajes de vacaciones debemos brindar a los peces el cuidado de una persona experimentada e instalar un filtro adicional, incluso más pequeño. La sobrealimentación conduce a una sobreproducción de metabolitos, y las bacterias presentes en el agua necesitan una gran cantidad de oxígeno para procesarlas, por lo que la demanda en el tanque ya es alta.